Cinthya y Pepi

Entrada publicada el 12/15/2014 6:31:53 PM


Mi nombre es Cynthia, tengo un hijo, Lorenzo y tres hijas, las “chicas” Blue, Flor y Pepper, que en realidad son 3 perras. Comparto mi vida con Ryan, mi pareja, ya que Lorenzo se fue a la universidad, pero también contamos con la compañía de las chicas, que en la actualidad son dos, porque Blue, que era una collie manto negro de 13 años, nos dejó hace unos meses.

Flor es una schnauzer sal pimentada, es cazadora, lleva siempre un aire apurado, como si le hubieran encomendado una misión confidencial pero especial, es hiperactiva, odia los gatos. Le gustan los cariños pero de repente se siente abrumada por tanta manifestación de cariño, y necesita darse una sacudida, y retomar su misión.

 

Pepper, que es una mestiza de color blanco grisáceo nos eligió como familia, un día que yo entraba al garaje, se entró al jardín, salí del vehículo y se paró sobre sus dos patitas, como un perro de circo, haciendo una serie de piruetas y mostrándose alegre. Me cayó muy bien de entrada pero pensé que se había perdido, y salí con ella por el vecindario preguntando si alguien sabia de donde venia.  Al día siguiente hice lo mismo, y no teniendo respuesta positiva, decidí que podíamos adoptarla. Así es que se integró a la casa; con Blue y Flor formaban una manada que sacábamos a pasear todos los días. 

 

Pepper que era bastante asustadiza al principio, ganó en confianza y arremetía, pese a su pequeño tamaño, contra cualquier perro. Al ser la más pequeña en tamaño y edad de las tres, se volvió la mimada de la casa, cosa que no era difícil porque tiene una mirada que enternece hasta a la persona más dura, es su lado teatral, sabe cómo llegar a la gente. Y como que, encanta a toda visita que pisa nuestra casa. Pero cuando sale a la calle, fortalecida de estar en medio de la manada, es la chica peleadora con la musculosa blanca. Pese a su tamaño y su lado enternecedor, cuando se trata de proteger su hueso, y acaparar el de los otros, es implacable. En dos tiempos tres movimientos, sustrae los huesos de las otras chicas, se los pone alrededor mientras mastica uno de ellos, y gruñe a quien se le acerque, generando gemidos de las otras dos chicas. Me imagino que esa su actitud deviene de su espíritu callejero y de superviviente.


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